martes, 12 de enero de 2021

DIFICIL REHUIRTE

 

Mi sílfide deseada,

cuidaré tu reposo

después de ser amada

y llenada de gozo.

 

Caímos abatidos

con tu amor de locura,

 mi mujer con dulzura

 dejándonos tan idos.

 

Tu cuerpo de amazona

sugerente descansa,

enciende y alecciona.

Mi amor no se cansa.

 

Contemplo tu hermosura

que indefensa duerme,

tu rostro de ternura

mi inspira perderme.

 

Rosados y divinos

son tus labios de rosa,

sensuales y tan finos

perfumados de rosa.

 

No puedo evitarte

es difícil rehuirte

te haces inminente,

tu amor es tan fuerte.

 

Carlos Rafael 

 

DIA 21

 

Aquella tarde de septiembre,

ella, de belleza refulgente

y ojos que hablan de amor,

apareció subidamente.

 

Bondadosa y llena de regocijo,

de pasos firmes y resuelta

avanzó indetenible hacia mí,

y me miró con tanta ternura.

 

Con inusitada rapidez,

su delicada mano derecha

retiró el barbijo de su rostro

de encanto desbordante.

 

Me abrazó efusivamente

como a un niño ávido de calor;

yo también la abracé fuerte.

Luego, todo fue un sueño.

 

Me beso en la boca, también lo hice,

y besé lo que más amaba de ella

sus lindos ojos, los amé y los amé…

Aún absorto, sigo soñando con ella….

 

Carlos Rafael 

INAGOTABLE AMOR


Duerme junto a mí

en esta noche de Luna llena,

tanto te he añorado para amarte

 hasta más allá de esta realidad.

 

Tus labios fraganciosos

de pasión inevitable de amor, besaré;

inagotable fémina del empíreo, te amaré,

hasta resolvernos una y otra vez.

 

Siempre te amaré,

aunque caiga de bruces a tus pies

o caiga bajo tu regazo, de tanto amarte;

viviré subyugado por tu forma de amar.

 

Carlos Rafael 

 

 

TANTA FELICIDAD

 

Al día siguiente, nuestros pensamientos

arrebatados por la última noche de amor;

ansiosos, ya esperamos la nueva noche.

 

Por Dios, qué hacer con tanta felicidad,

todas las noches son de Luna llena amor,

hasta el tiempo, cambió para nosotros.

 

¿Por qué así amada mía? ¿Dónde estuvimos

que ni el río aquel donde te bañabas de niña

pudimos siquiera gozar de nuestras travesuras?

 

 Carlos Rafael 

 

 

ME VENCISTE

 

Venciste a tu miedo,

luego, te fue fácil

con tus enemigos.

Ahora, vienes por mí.

¿Cómo pelearé contigo

si ya me venciste con

tus hermosos ojos?

 

 Carlos Rafael

 

 

 

SOMOS

 

Al amarnos nos desencadenamos

de todas las pasiones inhibidas,

somos incendiarios e irracionales;

nuestros subconscientes liberados

de tantos deseos reprimidos;

nuestros sueños de amor

emancipados y realizados.

Somos omniamantes a ultranza,

donde sea y como sea,

hasta en los andurriales 

jamás concebidos por los normales.

O sea, locos, locos de amor.


 Carlos Rafael 

MI GUERRERA

 

Aguardo tenso

en una sala fría

de un hospital,

la espera carcome

mi frágil sosiego;

mi alma, agobiada

en ristre y zozobra.

Sé que superará,

ella es mi guerrera,

batalladora probada,

fascinante y tierna;

férrea e inquebrantable,

de sonrisa triunfante,

inteligente y concisa;

de mirada- certera,

sustancial y resuelta.

Ella, es mi fiel amiga,

la de los ojos bonitos.

 

 Carlos Rafael